La mayoría de los bares manzanareños apuestan por espacios con humos

Los manzanareños han comprobado en estos primeros días del año que la mayoría de los bares y cafeterías de Manzanares son espacios habilitados para fumadores. En todos ellos ya está expuesto el cartel que informa sobre sí se permite fumar o no. Los propietarios de los conocidos bares "Lucas", "Mere", "Tubos" o "Corredor" señalaron que el elegir esta opción ha sido a petición de sus clientes. Se da la paradoja que estos empresarios no fuman. "Más del ochenta por ciento de los clientes fuman. Yo quería poner el bar para no fumadores porque no fumo, pero mis clientes son los primero", señaló el propietario del conocido Bar Lucas.

Uno de los pocos bares que ha optado por "espacio sin humos" ha sido la Cafetería "Venecia", situada en la calle Reyes Católicos. Sus propietarias han elegido esta opción porque sus clientes son en la mayoría jóvenes y en sus instalaciones se celebran muchos cumpleaños. "Llevo veinte años en el sector hostelero y pienso que esta ley beneficia tanto a fumadores como a los que no lo son. Creo que el no fumar en los sitios cerrados vendrá bien a todos", afirmó una de sus propietarias.

Por otro lado, los clientes de los bares donde se permite fumar y algunos manzanareños afirmaron que entre sus propósitos para el presente año no está el dejar el tabaco y que la ley es un poco excesiva. Expresaron que si dejaran de fumar sería por "motu propio" y no porque se lo imponga una normativa. "La veo excesiva en cuanto al ámbito de actuación que tiene en los bares y los restaurantes. Comprendo que si pagamos nuestros impuestos debemos fumar donde queramos. Si no quieren que fumemos que incrementen su precio", señaló un cliente del bar Mere.

Las opiniones son como los colores "para todos los gustos". Un manzanareño retaba al gobierno a que si le pagaran dejaría de fumar. Y otros manifestaron que no se debería dejar fumar en sitios públicos como los bares.

Cabe destacar que la ley prohibe fumar en los centros de trabajo, en centros sanitarios y docentes, instalaciones deportivas, centros comerciales o salas de usos públicos, y eleva la edad para poder comprar tabaco de los 16 a los 18 años. En estos lugares no se habilitarán salas especiales para fumadores en ningún caso.

Por otra parte, en los bares y restaurantes que tengan más de cien metros se tendrá que habilitar en el plazo de "ocho meses" zonas para no fumadores, siempre y cuando estén separados del resto de las dependencias y cuenten con sistemas de ventilación. Tal es el caso del Parador de Manzanares, el Hotel el Cruce o Mesón Sancho donde ya se han habilitado espacios para fumadores y no fumadores.

La Ley también incluye el establecimiento de sanciones si se incumplen las prohibiciones. Éstas oscilan entre los treinta euros, si la infracción es aislada, y los 6.000.000, en el caso de transgresiones muy graves.

En España, la población fumadora es del treinta por ciento, según datos de una encuesta nacional de salud de 2003, una cifra que coloca a nuestro país entre los de más consumo de tabaco de la Unión Europea.